Como cada verano, llegó el cumple de Casilda, y fieles a su llamada nos presentamos en sus dominios para acometer la imprescindible celebración.
En esta ocasión, debido a imponderables futbolísticos, hubo que esperar al desenlace del temido partido de cuartos, a cuyo satisfactorio final nos reunimos en la elegante terraza del Paseo Colón, donde nos esperaban las viandas impecablemente preparadas por ella misma y por su chef Javier.
Empanadas, salpicón de buey de mar, jugosa tortilla española y otros muy variados canapeses, sirvieron de base sólida al afrutado albariño del que liquidamos una buena sarta de botellas.
Al final, los cafés, bizcochos y tarta acompañaron la entrega de regalos y la posterior conversación relajada hasta bien tarde, mientras el skyline pontevedrés servía como telón de fondo a la onomástica celebración.
FELIZ CUMPLE, CASILDA
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